Santo Domingo, la capital de República Dominicana, es también la metrópoli más moderna y dinámica del Caribe. La Capital, como cariñosamente se le llama, transmite el pulso de la cultura dominicana, donde lo antiguo y lo nuevo convergen a la perfección, desde la arquitectura y la historia de siglos de antigüedad, hasta los grandes centros comerciales, galerías de arte, una activa e interesante vida nocturna y una irresistible escena gastronómica.
Explorar la Ciudad Colonial, el primer asentamiento europeo de las Américas y declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1990, es una experiencia recomendada para todos los viajeros. Este barrio histórico consiste en un laberinto de calles estrechas llenas de maravillas arquitectónicas que van desde el siglo XVI hasta principios del XX. Sus calles te llevarán hasta edificios coloniales convertidos en museos, tiendas, hoteles, restaurantes y cafés en las aceras.
Súbete en el tren Chu Chu Colonial para un tour de 45 minutos por el área, contrata un guía que te llevará por la primera calle pavimentada de América mientras compartes historias, o alquila una bicicleta y pasea por tu cuenta. Para un descanso rodeado de naturaleza, disfruta de un picnic en el césped del Jardín Botánico Nacional, el más grande del Caribe, o camina por el Malecón al atardecer para disfrutar de vistas al mar Caribe, puestos de comida y mirar a la gente pasar.